Por El Vigía
HABÍA UNA vez un reino llamado ‘El Corazón de México’ en donde se repartían sonrisas, abrazos y promesas incumplidas, pero eso sí se vendía la idea de que este lugar era un mundo de caramelo… más o menos así iría el cuento que les vende el gobierno municipal que dirige el monarca Rubén Camarillo a través de la flor más bella del ejido, Teresa Jiménez.
Y como el mundo mágico como pintan a la capital del estado, el diputado local con aspiración a convertirse en el rey feo del municipio de Aguascalientes, Quique Galo ha tomado muy en serio su papel y enfundado en su outfit de soberano anduvo de dadivoso, literal dando al pueblo ‘pan y circo’.
Se comenta que Quique Galo no se quiere quedar atrás en el grado de ridículo que maneja su competidor, Enrique de la Torre, ya que el bufón de los moños también suspira por la presidencia municipal del ‘Corazón de México’.
Con ello queda claro el nivel de política que viene manejando esta ‘realeza’ del PAN, y es que si por algo se distinguen estos pitufos es por sus costosas banalidades y ridiculeces.
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Petardazo resultó el delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI en Aguascalientes, Hugo Contreras Zepeda; y es que a su llegada a la otrora Tierra de la Gente Buena, el jalisquillo comenzó muy filoso al advertirles a los diputados locales y regidores de `su’ partido que no permitiría que ninguno de ellos hicieran enjuagues con los mandatarios locales –llámese gobernador del Estado y/o alcaldes-, amén de hacerse acreeedores a castigos muy severos.
Pero más tardó Hugo en hacerles esta indicación que sus correligionarios en caer en la tentación de los mandamases de Palacio Menor, y es que los legisladores y ediles del putrefacto RIP se han pre$tado a los caprichos y cochupos del gobierno municipal liderado por Rubén Camarillo a través de Teresa Jiménez, se comenta en el socorrido radio pasillo.
Siendo así, Hugo Contreras Zepeda es visto como ‘nadie’ por los tricolores locales que fieles a sus genes priistas, lo transa y mañosos no se les quita y ni se les quitará.
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