Por Macarena Ramírez
Denunció el Sindicato de Trabajadores del Hospital Miguel Hidalgo las precariedades con las que el nosocomio ha tenido que lidiar al tener que dar un ser vicio de alta calidad sin contar los requerimientos para solventarlo, esto en voz de Francisco Araiza, secretario general de dicha agrupación sindical.
Bajo este contexto, en conferencia de prensa en donde estuvo acompañado por todo el Comité Sindical, expuso el líder sindical que para la atención de pacientes con COVID-19, alrededor de 300 trabajadores del centenario hospital se han visto obligados a comprar su propio equipo, esto a fin de evitar contagiarse con el virus SARS-Cov2. Ello apuntó, ha implicado para cada uno de ellos el desembolso de hasta dos mil 500 pesos.
Pese a dichas carencias y dificultades, “el hospital Hidalgo ha dado un servicio completo a los pacientes contagiados de coronavirus, y a nivel nacional, es de los pocos hospitales que presentan cero muertes en el personal de salud por COVID-19, sin embargo, afirmó Francisco Araiza, “los contagios en el personal han ido en aumento”.
Derivado de lo anterior, solicitaron un mayor número de pruebas» para rastrear al virus en el personal de salud y darles la atención de manera oportuna, ya que de lo contrario, el riesgo laboral puede aumentar el estrés y esto puede mermar el desempeño del trabajador, a la vez, que los contagios propiciarían contratos de nuevo personal que no tenga el perfil requerido y no esté preparado para cumplir con el nivel de calidad que el hospital Hidalgo requiere».
Finalmente, Francisco Araiza apuntó que las 12 camas de terapia intensiva que se tienen en el referido nosocomio, “ya se encuentran llenas”, por tanto, indicó que se estaría acondicionando un piso extra.