Staff Al Día Ags
Continúan los abusos por parte de elementos de la Policía Municipal de Aguascalientes, a quienes además de volverse práctica constante el matar perritos, continúan con los abusos hacía con los ciudadanos a quienes juraron ‘servir y proteger’, nada más alejado de la realidad.
Estos abusos se cuentan por centenas, como en múltiples ocasiones lo ha dado a conocer la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHA) en donde el número de quejas contra los elementos municipales ocupan el primer lugar.
El caso que nos ocupa en esta ocasión involucra a dos personas del sexo masculino, Jonás “N” “N” y Roberto “N” “N”, quienes afirman haber sido incluso torturados por los policías, hechos que se suscitaron el pasado 28 de agosto de 2020 “en la calle Ezequiel A. Chávez a la altura del 211, casi esquina con calle Madero”, además, acusan a los elementos municipales del robo de un teléfono celular, según la denuncia que hicieron llegar a este medio de comunicación.
Uno de los ofendidos, Jonás, narró a Al Día Ags, “soy profesionista, es decir no soy un delincuente, pese a que a si nos trataron policías municipales el pasado día viernes 28 de agosto alrededor de las 02:52 horas como si fuésemos delincuentes, pues nos detuvieron arbitrariamente a mi amigo Roberto y a mí, para ser agredidos y robados por elementos de la policía municipal. Fuimos trasladados C-4 y de ahí nos dejaron ir por que no cometimos ningún delito, ni falta administrativa, pero en la arbitraria detención por parte de varias unidades en las que participaron entre otras las 0268 B2, 0014 y/o 0039-B1 de la policía municipal quienes a efecto de despojarnos de nuestras pertenencias nos torturaron, siendo que a Roberto lo golpearon en sus partes nobles y después golpes directos en la cara”.
Aunado a ello, continuó, “tras dicha agresión a mí me despojaron de nueve mil pesos y a Roberto de su celular que acababa de comprar días antes y que incluso lo debe en la tienda Coppel por lo que interpuse la denuncia de hechos ante la Fiscalía Estatal misma que se turnó a la mesa seis y que ya se ratifique; a la par esperando justicia pronta interpuse la queja en las oficinas de la alcaldesa Teresa Jiménez relatando los hechos como fuimos detenidos arbitrariamente, golpeado, robado, sin que hasta el momento se haya resulto nada, pese a que le proporcione datos suficientes a las instituciones”.
De estos hechos, pese “a que los policías que nos robaron trataron de borrar las evidencias y por lo fuerza me forzaron a poner la huella en mi celular para desbloquearlo, invadiendo mi privacidad escudriñaron mi celular y cuando dieron con el video donde yo grabé cuando golpearon a Roberto a quien a fin de someterlo le apretaron sus partes nobles y así despojaron de sus pertenencias y que posteriormente lo tiraron en el piso y lo golpearon con puños cerrados en el piso entre varios policía; video que grabé y que por la fuerza borraron los criminales policías”, sin embargo, pude recuperar fragmento de dicho video y una fotografía del policía que orquestó todo nuestro ataque y que ahora nos damos cuenta que en todo momento se comunicó por su celular y no por la frecuencia de radio”.
De esta forma, la víctima destacó que ha aportado todos los elementos y las pruebas para dar con los responsables. “No se vale que abusen de los que pagamos impuestos para que ellos tengan un sueldo, tampoco se vale que defrauden la función pública, pues resulta que te roba, te golpea y ataca quien se supone debe de cuidarte, que son los policías, y las autoridades no hacen nada por solucionar las cosas”.
“Ojalá nos pudieran ayudar a pedirles a las autoridades un poco de atención para dar con los responsables y se deje de encubrir por parte de nuestros gobernantes a estas personas que no les basta su salario como policías municipales, pues he solicitado audiencia con la alcaldesa (Teresa Jiménez) pero no hemos tenido respuesta”, concluyó Jonás.