Staff Al Día Ags. –

La secretaria general de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) en Aguascalientes, Verenisse Ruiz Sánchez, informó que el sindicato al que representa ya está listo para tomar las riendas de la responsabilidad tras las elecciones que se efectuaron el pasado 22 de septiembre en la Planta A1 y A2 de Nissan y en la que resultaron ganadores motivo por el que están recibiendo amenazas de muerte.

Ruiz Sánchez, explicó que tras la votación de los trabajadores para elegir a su nuevo sindicato, y que es algo histórico tomando en cuenta que: “desde hace más 20 años la CTM ha estado representando las necesidades e intereses de los trabajadores”.

“Lo que está ofreciendo CATEM es la oportunidad de elegir libremente, CTM no pone el piso parejo para que levanten las manos y no los corran, para que los trabajadores formen planillas de la base trabajadora y que sean ellos los que administren sus propias cuotas sindicales”

Dijo que desde ahora CATEM siempre velará por la libertad sindical pedida por las nuevas leyes del TMEC, y reafirmada por la Reforma Laboral.

“Actualmente el salario en la primera categoría de A2 es de $181 pesos y en ensambles son de $207 pesos, en la planta CIVAC de Morelos son $379 pesos, es la misma planta automotriz y están haciendo los mismos coches de NISSAN y es que en Cuernavaca agarran machetes, aquí somos la gente buena pero no somos tontos, son 12 horas de trabajo y no está permitido, no rotan las labores, los trabajadores se orinan en la línea de producción porque no los dejan salir”.

Para concluir denunció que los trabajadores de NISSAN que se están acercando a CATEM están recibiendo llamadas telefónicas intimidadoras.

“Están recibiendo llamadas donde les dicen que dejen de estar en este movimiento o los van a matar. Que generen propuestas y no generen amenazas, CATEM es un sindicato que está abierto a escuchar a los trabajadores y a darles resultados, este recuento es claro”.

Para concluir dijo que en CATEM no son ingenuos y saben que enfrentan el poder del estado, de la CTM y de la propia empresa NISSAN, y no se amedrentan llegaran hasta sus últimas consecuencias por el ejercicio de sus libertades y que a los trabajadores los respeten porque la propia CTM es quien amenaza a la paz laboral y social.