Por El Vigía

EXCESOS Y DESFACHATEZ de la alcaldesa de las sonrisas falsas  y los abrazos mustios, María Teresa Jiménez Esquivel, alias “Tere Jiménez”, quien ahora pretende brincar al Congreso de la Unión, eso sí, cuando “concluya su mandato como primer edil”, aclaró el figurín de barro malhecho, Enrique de la Torre “Kike Moñitos”, quien cobra como vocero de la nacida en el Estado de México, en una explicación no pedida.

Flaco favor le hizo el muñequito de pastel de boda chafa a su jefa, esto al “desmentir” –quien sabe a quién- que la mexiquense se iría como diputada federal dejando botada la Presidencia Municipal, como si alguna vez hubiera atendido dicho encargo, se comenta en el socorrido radio pasillo.

Solo que “Kike Moñitos” y las “focas aplaudidoras” de Teresa Jiménez, no saben “ler” y al ansía de quedar bien, armaron tremendo alboroto que a final de cuentas le ha sido adverso a su benefactora.

Y es que resulta que la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LEGIPE) en el capítulo II artículo 10  de los Requisitos de Elegibilidad señala: “Son requisitos para ser Diputado Federal o Senador, además de los que señalan respectivamente los artículos 55 y 58 de la Constitución: inciso F: No ser Presidente Municipal o titular de algún órgano administrativo en el caso del Distrito Federal, ni ejercer bajo ninguna circunstancia algunas de las funciones, salvo que se separe del cargo noventa días antes de la fecha de la elección”.

Que en caso de que por vericuetos que pudiesen encontrarse en la ley, lo cierto es que la mexiquense Teresa Jiménez además de denotar tremendo pavor a quedarse sin fuero, deja claro ser una persona con una ambición desmedida, dicen los que en todo están.

En el supuesto de no dejar el cargo de alcaldesa, el enjuague estaría de la siguiente manera: permanece como primer edil durante las campañas y el proceso electoral –obvio inmiscuyéndose en él-; pasadas las elecciones, solicita licencia al cargo de presidenta municipal para ir a rendir protesta como diputada federal, tras este trámite, solicita licencia al Congreso de la Unión para dejar a su suplente en su curul, y ella retorna a Palacio Menor a terminar su gestión; luego regresa a la Ciudad de México a quitar al suplente y tomar su lugar en la Cámara Baja; transcurridos cinco meses, Teresa Jiménez, nuevamente solicita licencia como diputada federal para retornar a Aguascalientes y buscar la candidatura a la gubernatura de este estado. Todo ello sin dejar de vivir del presupuesto, y lo más importante para la panista, con la protección del fuero.

Trascendió además que la dirigencia nacional del PAN para regalarle la diputación federal a la mexiquense, le puso como condición precisamente eso, dejar el cargo de alcaldesa, lo que a decir de “Kike Moñitos”, conocido también como #LordMalacopa, es un acuerdo que su patrona no piensa cumplir.

Todo ello es lo que las y los aduladore$ de Teresa Jiménez no dan a conocer.

Y aún hay mucha tela de donde cortar, así que como luego se dice… Esta historia continuará…

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