Por El Vigía

TRAICIÓN FUE la palabra que habría definido la intensa jornada que se vivió en el PRI el pasado fin de semana, lo que derivó en que Blanca Rivera Río se bajara de la contienda, dejando todo el pastel a los hermanos Norma y Francisco Guel Saldívar.

Trascendió que los carnales aprovecharon el berrinche que hiciera la ex primera dama del estado para apoderarse de las candidaturas, y es que a final de cuentas, la pugilista Norma se quedó no sólo con la candidatura a la Alcaldía de Aguascalientes -la que buscaba desde un principio- sino que además amachinó la primer posición plurinominal para la diputación local.

De esta forma, los herederos del ex gobernador de Aguascalientes, Francisco Guel Jiménez se despacharon con la cuchara grande al jugarle las contras a la esposa del ex mandatario estatal, Carlos Lozano de la Torre, quien durante su sexenio les dio cobijo a Norma y Paco, comentan los enterados.

Sin embargo, no sólo fue el exabrupto de Blanca Rivera Río por la modificación que habría hecho la dirigencia local del Revolucionario Institucional a su planilla de síndicos y regidores, sino que además los carnales Guel Saldívar habrían pasado factura al líder nacional de «su» partido, Alejandro Moreno Cárdenas «Alito», y es que no hay que olvidar que los hermanitos trabajaron para el ex gobernador de Campeche rumbo a la presidencia nacional del PRI, por lo que Norma y Paco tenían como se dice, derecho de piso, señalan los juiciosos.

Así entonces el registro de candidatos del tricolor se convirtió en un capítulo digno de la Rosa de Guadalupe, que dicho sea de paso quedó en suspenso, toda vez que nadie -sólo la dirigencia del partido- sabe a ciencia cierta quienes quedaron en el listado de abanderados, por lo tanto esta historia de traición, continuará…

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Y las cosas no son muy diferentes, es en el partido de la 4T, en donde los morenistas «puros» se castigaron solitos al encerrarse en la sede de dicho instituto político, dejando así el camino libre a los morenos fifís.

Siendo entonces que estos últimos se despecharon con la cuchara grande repartiéndose todas las candidaturas, mientras que a los «revoltosos» no les tocó ni una migaja del pastel, por lo que advirtieron que habrán de impugnar el listado de abanderados que se dio a conocer a petit comité.

Así entonces las cosas en MOREN Aguascalientes en donde al parecer no aprenden de los errores del pasado, condenándose a obtener los mismos pésimos resultados, refieren los metidos que nunca faltan.

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