Por Gabriela Jiménez

“Más que una imposición legal, el problema es la falta de clientes, podemos decir que los restaurantes están funcionando –en su gran mayoría- con servicio para llevar; esperemos que esto repunte porque lo principal es poder mantener los empleos en este momento”, expresó Claudio Innes Peniche, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos (Canirac) en Aguascalientes.

Ante las disposiciones de la autoridad municipal de la operación parcial de establecimientos o incluso el cierre de los mismos en la fase 1 de la contingencia sanitaria por el COVID-19, “la principal preocupación es poder mantenernos de pie las empresas restauranteras, y estamos trabajando en ese sentido, reforzando mucho las medidas sanitarias”, comentó el empresario restaurantero, quien señaló, que la Canirac tiene una postura imparcial ante las decisiones de las autoridades.

“Estamos atentos a las disposiciones de Gobierno, y trabajando con los tres niveles, con la Cofepris –que es a nivel federal-, Gobierno del Estado y Municipio. Nosotros estamos en espera constante de las disposiciones, la prioridad es la salud. Confiamos en que la autoridad correspondiente, sea quien sea, va a tomar medidas en este sentido”.

Sin embargo, reiteró su preocupación ante la drástica caída de las ventas que se ha registrado en estos días. “Los restaurantes, en el mejor de los casos, están trabando al 20 por ciento de sus ventas; esperemos que esto se estabilice un poquito, que la población reaccione al llamado de los restauranteros y de los comerciantes en general en el sentido de consumir lo local”, insistió, “la principal preocupación ahorita es mantener los empleos porque muchas familias dependen del sector restaurantero”.

Mencionó que son los meseros quienes se han visto más afectados “y una de las medidas que se están proponiendo es que los meseros se vuelven repartidores y de esa forma puedan mantener su trabajo y poder acceder a propinas”, apuntó que en lo concerniente a la Canirac son 105 restaurantes afiliados, “podemos hablar de un promedio de cinco trabajadores por restaurante”, lo que se traduce en un poco más de 500 trabajadores –por ende el mismo número de familias- que han visto mermados sus ingresos.

Finalmente, Claudio Innes Peniche destacó que la industria gastronómica es la es la segunda fuente de autoempleo en México, desde quien tiene un puesto de tacos, hasta los grandes restaurantes, por ello, “estamos trabajando de la mano tanto con Gobierno Estatal como Municipal para ver de qué manera van a apoyar a este sector”, en el caso de la autoridad municipal, dijo, “esperemos que municipio emita un Decreto que nos permita un pequeño respiro, no al 100 por ciento, pero sí con un porcentaje del pago de las rentas de los locales”.